jueves, 20 de marzo de 2025

Desde Los Andes


En un fría mañana de Marzo del 2025, a las 7 en punto, Danilo estaba cruzando Los Andes en su avión propio, cuando la aeronave comenzó a perder altura abruptamente sin explicación alguna. Espesas nubes lo cubrieron completamente, cuando salio de ellas ya era tarde, un de sus alas rozo contra un pico haciendo que perdiera toda dirección y se estrellara contra la espesa nieve de una ladera que por suerte amortiguo el golpe haciendo que sobreviva al impacto completamente ileso. No tenia explicación su accidente menos para el tan metódico, serio y profesional a la hora de revisar y acondicionar su estimado avión, el cual acababa de morir. No tenia víveres, no tenia mas ropa que la puesta, el frio lo envolvía y el tiempo corría de prisa a contra reloj para lograr sobrevivir. No tenia otra que caminar los empinados cerros nevados. Danilo, hombre de fe, invoco a Dios, a Jesús, a los ángeles y emprendió la marcha caminando lo que pensaba hacer volando. Aunque lo hacia volando pero mentalmente, cubriéndose de fe, repitiendo frases bíblicas que lo estimulaban. "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece", "Nada es imposible para el que tiene fe", "El enviara a sus ángeles en cuento a ti". comenzó muy bien su odisea, con todo el vigor de su juventud pero luego de 10 horas y no ver mas que esa blancura tan inerte y fría comenzaron a faltarles las fuerzas. Y esto justo cuando advirtió que superando ese cerro, su primer gran adversario superado, vería un indicio de civilización, pero no solo había otro cerro sino que mucho mas alto que el superado, pero como chispa que prende en la pradera, prendió su fe en el, convencido que detrás de ese, si vería signos de civilización y quizás hasta vería una ciudad a lo lejos.  Esa idea broto con tanta fuerza y certeza en su interior que solo ella le daba energía, haciendo la proeza de transformar en energía la verdad de su pronta liberación. Caminando con fuerzas en encumbrado camino. La felicidad lo inundaba con gran potencia solo imaginándose allá siendo recibido por unos campesinos que lo rescatara con gran hospitalidad ante semejante situación. Meditaba como solo esa idea le otorgaba tanta energía como si fuera alimento o incluso una droga. Hasta en su delirio imagino... o creyó imaginar...  una historia donde un grupo de personas esta en idéntica situación, y el líder con una audaz estrategia psicológica, les asegura a su grupo que ya estaba por desistir y entregarse a la muerte, que el sabe y esta muy seguro, que detrás de ese cerro esta la ciudad que era su destino. Y solo por esa palabras todos recobran las fuerzas y proseguían mas animados. Pero cuando van llegando el les cuanta una historia idéntica donde el líder le estaba mintiendo solo para estimularlo a seguir, pero les dice no se enojen porque con  esa mentira ustedes tuvieron mucha energía y siguieron, si se enojan, baja su entusiasmo y no capitalizaran esa energía que broto de la nada, de una ilusión pero que indiscutiblemente genero energía real, porque real fue ese bendito ímpetu que los tomo. Y lo hacia para prepararlos para la dura verdad que no había ninguna ciudad detrás del cerro sino mas nieve, picos y frio. Y el grupo entendía y asimilaba bien la piadosa mentira. Colocada como por la mano de experto enfermero para poner una vacuna temeraria. 
Pero esa historia dentro de una historia que Danilo creyó imaginar, le hizo presentir que en realidad era su ángel que lo estaba preparando para la cruel verdad luego de esa estimulación otorgada por la esperanza de la pronta liberación, detrás de ese pico, su segundo adversario solo había al igual que en su historia mas nieve, picos y frio. Pero también al igual que el grupo lo tomo bien para que su  angustia no le haga perder aquella energía venida de una ingeniosa ilusión. 
"Hola ángel como estas? se que estas ahí", dijo en vos alta y prosiguió su marcha desahuciado pero con un estimulo poderoso: estaba rodeado de ángeles enviados por Dios. Y no fue por la tierra sino por el cielo, volando, como ellos, de donde vino su liberación, porque en las alturas vio los aviones y helicópteros de rescate que los buscaban con la misma desesperación que el los deseaba. Muchos años después si entablo dialogo con su ángel cuando lo alentaba en sus arduas luchas psicológicas en su tribulación personal metal y física contra demonios y brujos alojados en las áreas celestes. El ángel le recordaba la resiliencia de aquella experiencia porque, grabada en su ADN, podía recurrir a ella cuando lo necesitara.  Pues el viaje y el inexplicable accidente solo había sido una preparación espiritual para la larga espera que el padecería hasta la liberación total por parte de su Señor Jesús en  su larga tribulación personal. El ángel también le recordaba las frases celebres que el le susurraba también emocionalmente en aquella oportunidad para que sembradas en su hipotálamo secretamente, florezcan como fuerza de voluntad en su cuerpo. Esas frase eran: Es increíble la fuera que el alma le puede trasmitir al cuerpo. Cuando todo allá pasado, los mejores momentos habrán sido los de la lucha. Bendito el hombre que encuentra felicidad en la adversidad. La adversidad y el dolor nos permite conocer nuestra propia fuerza. Y una bíblica, quizás la frase mas reveladora de toda la biblia: DICHOSOS LOS QUE ESPERAN EN EL. Porque los que caen, se trasforman de dichosos a malditos el el acto, por caer en la oscuridad, tras dejar vencer su razón y su espíritu por las emociones de su ego. El verdadero enemigo a vencer y superar. Ahí están las quejas, los lamentos, la naderías que nos hacen presa de demonios. Mientras el espíritu aguanta y soporta todo inmutable, estoico. Y esta en uno alejarse de uno y acercarse a otro. 
Esta experiencia tan parecida a La tragedia de Los andes, de los rugbier uruguayos, tragedia con tantas sincronicidades enigmáticas a la de los 33 mineros sepultados en la mina, donde todos salieron ilesos. Y todo en las mismas latitudes como una señal para emitir un potente mensaje encriptado desde el ultimo confín del mundo para toda la humanidad y los difíciles tiempo que vendrán sobre ella, y el mensaje es: QUE EL HOMBRE SEPA QUE EL HOMBRE PUEDE. FIN. CRISTOREY VEN SEÑOR JESUS.


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